Fotografía de una revista: Cuestiones de Fisioterapia desde su cubierta

EDITORIAL

Seguramente, no siempre nos fijamos en la cubierta de las revistas científicas que llegan a nuestras manos, entre otras cosas, porque es tal el cambio que estamos experimentando en relación al uso de estas revistas, que es casi anecdótica la vez que leemos algún artículo científico en un formato físico, que nos permita visualizar las primeras páginas, páginas en las que aparece un contenido de gran valor informativo y que, sin duda, pueden dotar al lector de una idea más completa del tipo de revista donde está integrado un determinado artículo; por ejemplo, se expone la estructura organizativa de la revista, el lema que acompaña normalmente a modo de subtítulo y que orienta sobre su línea editorial, la sistematización del índice y el tipo de artículos que se publican, se señalan las instituciones que patrocinan y avalan esa publicación y, sobre todo, las personas que hacen posible que ese artículo que ahora está en tus manos haya podido llegar hasta los lectores, en este caso, a tí.

Al observar nuestra cubierta, la cubierta de Cuestiones de Fisioterapia, quizá pueda evocarnos la idea de orden e información aséptica, impresa sobre fondo verde, resaltando el corazón y la esencia del contenido de la revista (la Fisioterapia) desde el símbolo de las manos que aparece en lugar de preferencia, arriba y a la izquierda. Quizá la búsqueda de la sistematización de la información y de llevar al lector a través de un solo «click» visual los artículos que contiene la revista, fueron los motivos que justificaron en su momento la austeridad en cuanto a elementos de mayor creatividad y color en la cubierta. Nuestra revista se centra desde su primera página de presentación en el trabajo de los autores y en el esfuerzo de tantos fisioterapeutas que escriben sus trabajos científicos, por eso la parte más amplia y central de la cubierta se dedica al índice de artículos. Por supuesto, esto se hace para facilitar al lector la localización de artículos que puedan ser de su interés, pero también, porque son precisamente los trabajos científicos de los fisioterapeutas los que entendemos deben ocupar este emblemático y epicéntrico lugar de nuestra revista.

En la cubierta podemos ver que la palabra que más sobresale, por encima de las demás, es FISIOTERAPIA. Evidentemente, el motor y el corazón de esta revista no es otro que nuestra Ciencia y Profesión, desde todas sus perspectivas, áreas y ámbitos, acompañada esta palabra de otra quizá más sencilla y cotidiana como es «cuestiones», porque, cualquier tema que le interese a los fisioterapeutas y a sus equipos de trabajo en el ámbito de la academia, de la profesión o de la ciencia, puede tener cabida en nuestra revista, y más allá de ser un término menor, «cuestiones» hace referencia a una amplia diversidad de asuntos, palabra acuñada del latín quaestio, -ōnis, que presenta como acepciones la intención dialéctica de averiguar la verdad sobre algo o problema que debe ser resuelto por métodos científicos. Por tanto, «cuestiones» como denominación para nuestra revista, va más allá de ser una denominación romántica o coloquial para reflejar la necesidad de encontrar respuestas a aquellos problemas que preocupan a los fisioterapeutas, subrayando que la forma de encontrar esas respuestas debe ser siguiendo los protocolos que determina la Ciencia.

También en la cubierta encontramos las instituciones desde donde se elabora, ordena, diseña, difunde y distribuye la revista Cuestiones de Fisioterapia, y este, más allá de ser un tema formal o de importancia menor, requiere en este editorial una mención especial, porque no podemos pasar de puntillas por las universidades que avalan esta publicación: la Universidad de Sevilla y la Universidad de Alcalá, dos Universidades Públicas que han sido, son y estamos persuadidos de que serán marco de referencia en muchos ámbitos de la vida universitaria de la Fisioterapia, también en sus publicaciones científicas. Estas dos universidades, aun teniendo que repensar, entre otros mil aspectos, cómo evolucionará la cubierta de nuestra revista y cómo deberá afectar el impacto tecnológico de las comunicaciones a su proceso de edición y difusión, seguro que sabrán respetar la esencia que permitió el inicio de esta publicación que va camino de cumplir un cuarto de siglo de historia. A las instituciones universitarias, se suman las colegiales, órganos de representación profesional que tienen como instrumento de comunicación científica la revista «Cuestiones de Fisioterapia », considerando que es esta revista una de las mejores formas de llevar a una gran cantidad de fisioterapeutas colegiados, los avances en el ámbito de la Fisioterapia de una forma cercana y regular. No todas las profesiones tienen este recurso, es más, no es difícil que una publicación inicie su andadura vinculada con alguna de las instituciones anteriormente mencionadas, lo realmente difícil es conseguir mantener estas publicaciones en el tiempo y, en gran medida, «Cuestiones de Fisioterapia» ya ha demostrado su valía, solidez y nivel de consolidación en la cultura de la literatura científica de nuestra profesión en lengua española.

Cuestiones de Fisioterapia, al igual que su cubierta, seguirá el ritmo de cambio y evolución de muchas otras revistas que han transformado su formato en papel para sólo existir como entes virtuales, y aunque actualmente tiene un formato físico, tangible, palpable y claramente reconocible en hospitales, universidades, bibliotecas, centros de salud, centros de fisioterapia, etc., está en proceso de adentrarse en el inevitable e imprescindible mundo técnico-tecnológico que está protagonizando este siglo XXI, pero mientras ese momento final llega, todavía hoy podemos degustar una nueva cubierta y así, ver, tocar, abrir, observar y disfrutar en español de artículos científicos que son el fruto del esfuerzo y el trabajo de muchos compañeros fisioterapeutas que quieren dar a conocer sus avances científicos, los resultados de sus investigaciones, las resoluciones a no pocas lagunas del conocimiento; y lo hacen con la satisfacción de que serán también muchos los fisioterapeutas que los lean, que apliquen sus contenidos, que los compartan y que los utilicen como referencia para, entre todos, seguir construyendo un horizonte realmente fructífero para nuestra profesión.

Chillón-Martínez R.