Evaluación de programas de prácticas clínicas

Resumen

Es necesario reflexionar sobre la calidad de la formación que la Universidad española ofree a los alumnos de estudios relacionados con las ciencias de la salud en general, y, muy especialmente, sobre la calidad educativa de los Programas de Prácticas Clínicas, materia extremadamente sensible en la que, nada más y nada menos, se han de integrar todos los conocimientos, habilidades y destrezas intelectuales y técnicas, así como las actitudes y los valores que han de definir al futuro profesional.
Tenemos que reconocer que, en demasiadas ocasiones, las Prácticas Clínicas han sido tan mal entendidas y tan poco valoradas, que han consistido en depositar a los estudiantes en el medio clínico, sea hospital o centro asistencial correspondiente, donde, en algunos casos, han sido abandonados a su suerte, bajo la idea implícita de que adquirirían las competencias profesionales por una especie de osmosis etérea, visual o práctico-manual, y, en otros casos, mejor considerados, entregados a la buena disposición de cualquier profesional bondadoso y bienintencionado que prohijara o apadrinara al estudiante, iniciándolo en los complejos procesos de atender a los pacientes con más voluntad que metodología.
Este libro parte de un contexto bien distinto, pues la evaluación de la calidad se plantea sobre una situación de partida, en la que las Prácticas Clínicas están consideradas como una materia fundamental bien diseñada, bien programada y bien estructurada, pues de otra forma difícilmente podría acometerse el proceso de su evaluación. Desde esta perspectiva, los autores no sólo nos presentan un valiosísimo instrumento para evaluar las prácticas clínicas, sino que van mucho más allá, de forma que, aún sin proponérselo, nos ofrecen un modelo en el que sustentar la estructura, organización y programación de materia tan sensibles y tan indispensables, no sólo en el proceso formativo, sino en la conformación de un nuevo modelo de intervención asistencial que, acorde con las responsabilidades que las leyes actuales confieren a estos profesionales, habrán de desarrollar los estudiantes cuando abandonen las aulas y se entreguen al ejercicio de la profesión.

Tomás Gallego Izquierdo – Daniel Pecos Martín